Listado de enfermedades incapacidad permanente total
No es realista creer que obtener la incapacidad permanente es fácil, ya que es una de las pensiones más difíciles de obtener en un sistema de prestaciones contributivas.
La razón es sencilla: se aplican criterios más sencillos a las pensiones de vejez y viudedad. Sin embargo, en caso de incapacidad permanente, existen normas que regulan determinados aspectos que deben tenerse en cuenta a la hora de concederla o denegarla. Esto requiere una investigación detallada y más medidas de las que se han tomado hasta ahora.
Pensión de invalidez permanente
Las pensiones de incapacidad permanente son prestaciones económicas gestionadas por el Instituto Nacional de Estudios de la Seguridad Social (INSS). Son contributivas y se conceden por disminución de la capacidad laboral debida a los efectos de procesos traumáticos causados por enfermedad o accidente.
Según el grado de incapacidad, se distingue entre incapacidad parcial, incapacidad total, incapacidad total y gran invalidez.
Requisitos generales
La solicitud debe cumplir una serie de requisitos.
Quizás te interesa:Ejemplo nómina incapacidad temporal por enfermedad común- No debe haber alcanzado la edad de jubilación.
- Debe estar afiliado a la Seguridad Social o encontrarse en una situación equivalente a la afiliación.
- Debe existir un periodo mínimo de cotización previo.
Pueden aplicarse requisitos específicos y otras condiciones en función del tipo de incapacidad.
Incapacidad permanente
La incapacidad permanente es la situación de un trabajador que, tras cotizar a la Seguridad Social y recibir el tratamiento prescrito, presenta una disminución anatómica o funcional importante durante un periodo determinado por la ley, objetivamente valorado, previsible y que limita o suprime su capacidad laboral.
Otras situaciones de incapacidad laboral
Este derecho no se excluye si la posibilidad de que la persona incapacitada recupere la capacidad de trabajar se considera médicamente incierta o a largo plazo.
En el caso de una persona discapacitada, una deficiencia anatómica o funcional existente en el momento de la afiliación a la Seguridad Social no excluye la calificación de incapacidad permanente, aunque la deficiencia se agrave después de la afiliación y, sola o en combinación con una nueva lesión o enfermedad, provoque una reducción o eliminación de la capacidad laboral que la persona poseía en el momento de la afiliación. Ello no impide que la situación pueda calificarse de incapacidad permanente.
Por tanto, la discapacidad en su forma no causal consiste en cualquier defecto físico o psíquico previsible y permanente, congénito o no, que pueda mermar o alterar la capacidad física, psíquica o sensorial de la persona que lo padece.
Quizás te interesa:Pensión de incapacidad permanenteLa incapacidad permanente debe derivarse de una situación de incapacidad temporal, salvo que se trate de una persona que no goce de protección en materia de incapacidad temporal y el motivo sea la paridad con una situación de exención, pero sin incluirla, la paridad con un trabajador que se encuentre en la misma situación, o la propiedad intelectual de un acceso a la propiedad intelectual desde una situación no exenta.
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